Cuando planeamos este viaje tenía claro que uno de los MUST iba a ser pasar un día en un auténtico Rancho americano. Los caballos han sido siempre una de mis mayores pasiones y poder montar en Estados Unidos al más puro estilo americano era algo en lo que siempre había soñado. Si buscáis un poco en internet encontraréis mil sitios en los que poder realizar excursiones a caballo en la zona pero si os tengo que ser sincera no quería acabar en el típico sitio en el que se hace una excursión en grupos de 10 o más personas y en la que se va en fila. Para que me entendáis, no quería ir a una típica "atracción turística" a caballo.
Yo quería vivirlo de un modo distinto, algo que no fuera solo para turistas y debo decir que tras buscar y buscar encontré el sitio ideal. Si lo que buscáis es una auténtica experiencia os recomiendo Sandy Valley Ranch. Pero vayamos por partes...
El séptimo día del viaje amanecíamos en la suite del Caesar's Palace después de haber dormido apenas 4 horas. Nos levantamos, nos vestimos y bajamos a la recepción a por un café y algo para comer. Nos lo subimos todo a la habitación - teníamos un salon para desayunar así que había que aprovecharlo -. Recogimos todas nuestras cosas y fuimos en busca del coche. Para llegar al parking teníamos que pasar por el casino así que decidimos jugar un par de dólares en la slot machine pero no tuvimos mucha suerte.