Nuestro primer día en Los Angeles iba a ser muy movidito ya que queríamos ver muchas cosas en un solo día. A las 7 de la mañana ya estabamos despiertos, me imagino que por los cambios de horario, asi que decidimos salir pronto del motel, desayunar en algun sitio e ir directamente hacia el Hall of Fame. Desayunamos al lado del hotel en un sitio llamado La Monarca Bakery, un sitio parecido a Starbucks.
Al salir de allí tan solo tuvimos que andar unos cuantos metros para encontrarnos ya con las estrellas del Paseo de la Fama. Evidentemente de las primeras que encontramos conocíamos muy pocas pero poco a poco conforme nos ibamos acercando al centro, al teatro chino y al Dolby Teathre ya empezamos a ver las de los artistas, cantantes, actores... más conocidos.
Este es un recorrido que si o si hay que hacer a pie e irse parando en todas las estrellas de aquellos artistas que más te giatan. Empiezas haciéndote una con todos aquellos que conoces ya que al inicio quizá no son muchos pero luego llega un punto que empiezas a seleccionar con quien te la quieres hacer porque hay miles y miles.
Algo muy caracteristico de este paseo son los chicos propaganda. Es decir, esos que intentan venderte un tour por Hollywood con una mini furgoneta en la que te llevan a ver las casas de los famosos. Hay cientos de empresas que lo hacen asi que en cada esquina os encontrareis a alguien que os da un papelito con la información. Os recomiendo que no os paréis a no ser que os interese hacerlo porque sino os tendran allí un buen rato explicando. También hay artistas callejeros que te regalan sus cds y te lo dedican diciendo que van a ser famosos y luego cuando han terminado de firmartelo te piden que les ayudes con algo de dinero.
También estan los que se visten de personajes de alguna pelicula y se plantan en mitad de la calle para que te hagas fotos con ellos. De entre todos el que más me gustó fue uno vestido del chico tonto de Resacón en las Vegas.
Delante del Chinese Theatre encontrareis las huellas de las manos y los pies de algunos famosos. Es muy gracioso ver las huellas que dejan las chicas con los tacones.
El Dolby Theatre en cambio forma parte de un gran centro comercial con muchas tiendas y sitios donde comer.
En ambos teatros se puede entrar con visitas guiadas pero de eso no os puedo informar ya que nosotros no hicimos ninguna por falta de tiempo. Comimos en ese centro comercial después de hacer algunas compras. Como no podía ser de otra forma, nuestra primera comida en America iba a ser una enorme hamburguesa - pero no esperaba para nada que fuera tan enorme - se me hizo eterna, iba a explotar.
Después de comer decidimos coger el coche para ir hasta Beverly Hills. Algo a tener en cuenta si vais en coche es que en la mayoría de los parkings puedes estar 2 horas sin pagar, es perfecto para no preocuparte de donde vas a dejar el coche.
Beverly Hills es un mundo a parte, la calle principal, la famosa Rodeo Drive esta llena de tiendas de las mejores marcas. Además también os quedaréis embobados viendo los coches que pasan por alli...
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De allí nos fuimos directos a Santa Monica Pier y allí también encontramos un Parking justo delante en el que no se paga la primera hora y media. Vale la pena ir hasta allí, seguro que habéis visto mil imagenes del mini parque de atracciones del muelle pero os aseguro que verlo en directo os va a gustar.
Además allí también encontraréis el Bubba Gump de Forest Gump y el cartel de fin de la Ruta 66.
La playa de Santa Monica es tal cual te la imaginas, como seguro habéis visto millones de veces en Los Vigilantes de la Playa.
Después de Santa Monica fuimos directamente a Venice Beach para ver la puesta de sol desde la playa ya que en Santa Monica hay muha gente. Antes de acercarnos a la playa paseamos por las casas que hay alrededor de los canales que simulan Venecia.
Venice era mucho más tranquilo y había algunos surferos que se adentraban en el mar mientras se ponía el sol.
Decidimos ir a pasear y cenar el Downtown LA al famoso El Pueblo pero no tuvimos en cuenta que eran ya las 10 de la noche y que ya habían cerrado todos los puestecitos así que nos tuvimos que conformar con ver los imponentes rascacielos iluminados desde el coche y volver a Hollywood para buscar un sitio en el que poder comer algo.
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