domingo, 10 de agosto de 2014

Welcome to United States of America

¡Después de 9 horas de avión llegamos a nuestro primer destino, Philadelphia, donde haciamos escala. La verdad es que no se me hizo nada pesado el viaje. Cada asiento dispone de su pantalla con una infinidad de peliculas y series por ver, además hay música, juegos, gps para saber por donde va el avión...


 Yo nunca había cogido un avión de estas características y ¡me ha encantado! Te dan una manta para que no pases frío y un cogín para estar más cómodo. Las azafatas no paran de pasar en todo el viaje ofreciendote bebida (sin pagar nada), algo a lo que no estoy acostumbrada con mis vuelos Ryanair. 




Una de las dudas que yo tenía antes de subirme al avión es si habría algun tipo de enchufe donde poder conectar el telefono y cargar la bateria. En cada asiento hay una entrada de USB con la que poder cargarlo pero no se si es normal o no pero las nuestras no funcionaban así que no os confieis. 
En Philadephia eran las 3 del mediodía cuando aterrizamos y hasta las 6 de la tarde no teníamos el siguiente vuelo hacía Los Angeles. Antes de poder salir a recoger la maleta para llevarla a la cinta correspondiente para el siguiente vuelo, tuvimos que pasar el control de entrada en el país. Allí haces un poco de cola hasta que te toca tu turno así que no es muy recomendable coger una conexión con otro vuelo con poco tiempo entre uno y otro.

Una vez te toca a ti vas hacía un mostrador donde se encuentra un policia al que tienes que entregar el documento que te dan al subir al avión rellenado. Alli hay algunas preguntas pero aún y así, el policia te interroga haciendo preguntas como, cuantos días vas a estar en EEUU, en qué zona vas a estar, la dirección de donde te vas a ospedar la primera noche, en qué trabajas...  a nosotros incluso nos preguntaron si eramos pareja y donde nos habíamos conocido, creo que esto último fue más bien curiosidad del policia al ver que Andrea era italiano y yo española. Además tienes que registrar tus huellas digitales de ambas manos.

Por desgracia perdimos un poco más de tiempo de lo previsto ya que al llamarme Garcia de segundo apellido tuve que ir a pasar un segundo control ya que el policia me dijo que había muchos llamados así. Allí no tuve que hacer nada en especial, solo esperar a que una tipica policia americana me devolviera el pasaporte y me volviera a preguntar cuantos días iba a estar en el país. La gran mayoría de gente que esperábamos eramos españoles :) 

Una vez recogidas las maletas y llevadas a la cinta correspondiente y pasado el control de seguridad fuimos a cenar algo antes de subir al avión. Dentro la terminal me encontré a gran parte de los mecánicos del Mundial que hacian escala allí para coger el vuelo a Indianápolis. El aeropuerto de Philadephia es enorme y hay mil sitios donde comer algo. El vuelo de allí hasta Los Angeles es de 5 horas aunque con la diferencia horaria que hay parece que sean 3. Este avión ya no era tan cómodo, era bastante parecido a los de Vueling, aunque también en este te servían de beber sin tener que pagar nada. Yo que no estoy acostumbrada a esto le pedí un cafe a la chica y cuando me lo trabjo le pregunte cuanto le debia, fue entonces cuando me dijo que era free.

Llegamos a las 21h (horario local) a Los Angeles y allí tras recoger las maletas cogimos el shuttle bus que te lleva a las oficinas de los coches de alquiler. Cada empresa tiene su autobus así que fijaros bien en que shuttle os subís. Nosotros lo hemos cogido con Alamo y la verdad es que está bastante bien de precio y hemos podido coger un Fullsize por el mismo precio que coger un economy en Europa 3 días ¡y vamos a estar 10! Si vais a conducir más de una persona decirlo sin problema porque a diferencia de Europa, no te hacen pagar más por un segundo conductor y así váis más tranquilos.

Nos llamó mucho la atención el modo de entregarte el coche... En el mostrador no te dan las llaves, solo el contrato y vas directamente al parking. Allí estan los coches divididos por categoria y tu vas a la que hayas cogido y de entre todos los coches que hay allí escoges el que más te guste, todos tienen las llaves puestas así puedes ver el interior y llevarte el que se adapte mejor a tus necesidades, eso sí, ¡todos automáticos!



De allí nos fuimos directamente al hotel, situado en Hollywood - Hollywood Palms Inn & Suites - , ya que entre una cosa y la otra se había hecho tarde y estabamos muy cansados de todo el día de viaje.




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